No estás del todo mal… sólo que tampoco estás bien. Y encima, todo lo malo te sucede a ti. Y así llevas mucho tiempo. -¿Cómo lo puedes solucionar?– te preguntas.
Te sientes cómo fuera de lugar… ¡que algo no encaja! Sólo que no sabes que es. Y eso no te deja estar bien. Puede que, incluso, te hayas gastado muchísimo dinero en todo tipo de terapias y, después de algún tiempo, todo vuelve a estar igual para ti.
Tal vez te hayas leído 50 libros de autoayuda. Y después del subidón que tuviste con cada uno de ellos, todo volvió ha estar igual. No, igual no, peor. Porqué después de ver que nada cambiaba, a tu estado anterior se le añadía la frustración de ver que esa receta no funcionaba.
Y es que… nadie es capaz de decirte que estás mal. Sin embargo, tu no te sientes bien. ¡Y estás hart@ de esta situación! Desearías ir a algún sitio y que, apretando un botón, arreglaran todo lo que te pasa. Sólo que no existe ese sitio… ni tampoco ese botón.
Tu visión del problema… mantiene ahí el problema
Desde la perspectiva habitual, lo que te sucede es un producto de la mala suerte, o del azar. -¿Por qué a mí?- te estarás diciendo. Y desde ese paradigma, difícilmente puedas hallar la solución.
Y esto es así porqué estás buscando la causa donde sólo existen los efectos: el mundo físico. En el mundo físico, todo lo que puedes ver son los efectos de algo que se gesta en otro lugar, un lugar no visible. Cómo decía Antoine de Saint- Exupéry autor de El Principito:
Lo esencial es invisible a los ojos
Y es que lo invisible determina lo visible. Es como las raíces no visibles de un árbol, que sostienen el tronco y las ramas visibles. Sin una buenas raíces, el árbol se viene abajo.
Tu Espacio Interior
Y, en tu caso, existe una dimensión más profunda en ti, dónde se encuentra tu poder interior, que no es visible a simple vista pero que determina todo lo que te pasa en tu vida.
¿No te lo crees? Lo dice, también, la física cuántica. Sólo el 0,0000000000001% del universo es espacio visible. El resto, el 99,9999999999999%, no es visible pero está ahí. ¡No es espacio vacío!
Y ese espacio no vacío, no está ahí por casualidad. Está ahí para algo. Como te puedes imaginar, tanto espacio afecta, y de que manera, al mundo que ves.
Y es ahí, en ese 99,9999999999999% de universo no visible, donde se encuentran las causas que dan forma al mundo visible. En la media que busques tus soluciones en el mundo visible, nada, en esencia, cambiará para ti.
¿Dónde está la solución?
Existe otra perspectiva desde la cual todo lo que sucede es por algún motivo. Está ahí para algo. Y, desde ese punto de vista, hasta una mala situación parece más reconfortante.
Y no se trata de hacerse el tonto y cerrar los ojos a la realidad, sino todo lo contrario. Se trata de abrir los ojos del corazón y percibir, desde ahí, la auténtica realidad. Aquella que se nos escapa más allá de las formas y de los pensamientos. Aquella que contienen las causas que gestan todo lo que percibimos.
Ya lo decía el Dr. Wayne Dyer…
Soluciones espirituales para los problemas materiales
En este punto, pretender solucionar algo que no va bien, haciendo más de lo mismo, no funciona. ¡Ya los has hecho antes! Se trata de ir allí donde se encuentran las verdaderas causas. En tu interior. En tu Consciencia.
-Bueno, genial… y ¿cómo se hace esto?- estarás pensando -Si todo esto que dices es muy bonito pero, ¿como lo aplico a la práctica?
La solución Invisible
Pues bien, no hay recetas, como has podido comprobar. Pero lo que sí está claro es que el primer paso es buscar la solución donde realmente se encuentra. Y no se encuentra donde habitualmente se busca.
Se encuentra en tu mundo interior, en tu espacio interior. Más allá de tus pensamientos. Incluso más allá de tus emociones. Lo que piensas y lo que sientes no dejan de ser una forma en la que se manifiestan las cosas. Una forma como cualquier otra, del mundo de los efectos. Las causas se encuentran en tu Ser. El mundo de la consciencia.
Tal vez, te ayude a llegar ahí, preguntas como:
- ¿Qué mensaje esconde este malestar?
- ¿Para que me sucede lo que me sucede?
- ¿Qué me intenta decir mi duendecillo interior?
- ¿A qué me estoy resistiendo?
- ¿Qué tengo que cambiar, en mi forma de ser, que permita el cambio al que me estoy resistiendo?
- ¿A qué le tengo miedo?
Estas preguntas, y otras que se te puedan ocurrir en esta línea, te llevan a tu interior. Te llevan a ese espacio invisible de consciencia dónde existen las causas de lo que te está pasando.
Usa todo aquello que conozcas, que te ayude a conectar con tu Ser: meditación, pasear por el parque, Yoga, hacer deporte, Chi Kung, realizar tu hobby, Reiky,… Por ahí encontrarás la respuesta. En la medida que aumentes tu nivel de consciencia, te resultarán mas claras y evidentes las causas de lo que te sucede. Y, este, no es un camino rápido.
Todo lo que te pasa es por algún motivo. En definitiva, nada te pasa por casualidad. Desde esta perspectiva, tener un problema es casi una bendición, es una oportunidad para crecer: ¿qué mensaje se esconde ahí detrás para ti?
Espero que este artículo te haya sido de alguna ayuda, este es el motivo por el que lo he escrito. Si es así, no dudes en compartirlo en tus redes sociales favoritas. Este gesto le da valor a este contenido. ¡Gracias!
photo credit: Paco CT via photopin cc
photo credit: StarryEarth via photopin cc
photo credit: Obikani via photopin cc
6 comments
Xavier 16 abril, 2015 at 18:51
Me gusta mucho esta entrada.
Carles Cantallops 20 abril, 2015 at 11:11
Muchas gracias Xavier, espero que te sea de gran ayuda
pegatinas personalizadas 15 abril, 2015 at 02:00
Muy chula esta entrada, aprovecho para felicitaros por esta página, que os he encontrado por internet
y me parecen todos los contenidos muy interesantes =)
Carles Cantallops 20 abril, 2015 at 11:22
Muchas gracias!! La idea es que estos contenidos puedan resultar de ayuda o inspiración. Un fuerte abrazo!!
masaje alicante 15 abril, 2015 at 01:34
me gusta mucho como relatais esta noticia
Carles Cantallops 20 abril, 2015 at 11:27
Muchas gracias! Espero conseguir que se entienda… Un fuerte abrazo!